El aumento de las tensiones comerciales entre EEUU y China perjudica a todos, según Volkswagen

Londres.- El director financiero de Volkswagen, Frank Witter, ha advertido de que un aumento de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China por el tema de los aranceles sería “perjudicial para todos”.

“Confiemos en que se pueda evitar una escalada”, ha afirmado Witter en una entrevista a The Wall Street Journal recogida por Efe Dow Jones, en la que ha considerado que “es importante sentarse a hablar de los problemas de ambas partes”.

Witter es uno de los ejecutivos de grandes conglomerados internacionales, como Apple o BlackRock, que han avisado de las consecuencias de este enfrentamiento tras una semana de duros cruces de acusaciones entre Pekín y Washington.

Tanto China como Estados Unidos son mercados importantes para Volkswagen y una guerra comercial podría ser perjudicial para el fabricante de automóviles alemán. “Es fundamental que se reduzca la tensión”, ha reiterado Witter.

El directivo ha asegurado que está revisando la cadena de suministro de Volkswagen, pero ha reconocido que no podría hacer cambios a corto plazo si las tensiones comerciales entre la Unión Europea y Estados Unidos o entre este país y China cambiasen significativamente.

“En nuestro sector, no hay forma de realizar movimientos abruptos a gran escala en el corto plazo”, ha indicado.

“Hay una distribución, hay contratos, hay una base de suministro, hay una capacidad. Invertimos grandes cantidades de dinero en instalaciones y plantas, por lo que nuestro sector tiene una flexibilidad limitada a corto plazo”, ha afirmado.

El Gobierno estadounidense exigió la semana pasada un mayor acceso a China de los fabricantes de automóviles y de chips, así como de las firmas financieras estadounidenses.

El presidente del país, Donald Trump, amenazó el jueves con imponer aranceles a las importaciones chinas por hasta 60.000 millones de dólares (más de 48.000 millones de euros), a lo que China contestó un día después con gravámenes a productos estadounidenses por valor de 3.000 millones (unos 2.400 millones de euros), después de que entraran en vigor los aranceles a las importaciones de acero y aluminio de Estados Unidos.

La Unión Europea, por el momento, ha logrado una exención temporal de los aranceles estadounidenses al acero y el aluminio importados, lo que ha permitido que “se ganase tiempo”, según Witter.

“Pero el tema sigue sobre la mesa” y es “complicado”, ha considerado.(EFE).