La factura del “brexit” puede diferir del cálculo de Londres, según la NAO
Londres.- La factura que abonará el Reino Unido al abandonar la Unión Europea (UE) o “brexit” puede diferir de las estimaciones que ha hecho públicas el Gobierno, según alertó hoy la Oficina Nacional de Auditorías británica (NAO, en inglés), organismo parlamentario que evalúa el gasto público.
Londres prevé pagar entre 35.000 y 39.000 millones de libras (de 39.900 y 44.500 millones de euros) por contribuciones a la UE ya acordadas y otros conceptos, si bien la NAO considera que “cambios relativamente pequeños” en los supuestos con los que trabaja el Ejecutivo pueden “empujar” el coste “fuera de ese rango”.
La Oficina Nacional de Auditorías ve “razonable” el cálculo del Ejecutivo, si bien considera que el coste real de la salida del bloque comunitario no se puede establecer hasta que estén claras las condiciones del “divorcio” y el futuro acuerdo entre ambos lados del Canal de la Mancha.
En particular, será necesaria mayor certidumbre sobre las condiciones del período de transición, previsto entre abril de 2019 y diciembre de 2020, el coste final de su aportación a las pensiones de funcionarios británicos y qué organizaciones británicas participarán en programas comunitarios tras el “brexit”.
La NOA señala que el Reino Unido podría tener que hacer frente a obligaciones no previstas hasta ahora, como aportaciones al Banco Europeo de Inversiones (BEI) y al Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER).
El organismo subraya que las incertidumbres sobre el futuro acuerdo entre Londres y Bruselas, cuya negociación sigue en marcha, significan que el coste podría ser finalmente mayor o menor al previsto.
“Las estimaciones tienen en cuenta diversos conceptos que fluctúan, así que el rango del coste podría haber sido más amplio”, señaló en un comunicado el director de la Oficina Nacional de Auditorías, Amyas Morse.
A medida que se acerque la fecha del “brexit”, previsto para el 29 de marzo de 2019, y el futuro voto en la Cámara de los Comunes sobre el eventual acuerdo que se alcance con la UE, Morse espera que el Gobierno “entregue una cantidad sustancial de material para que el Parlamento lo considere”.
París, 20 abr (EFE).- El negociador de la Unión Europea (UE) para el “brexit”, el francés Michel Barnier, alertó hoy de que el posible establecimiento de una frontera estricta en Irlanda del Norte y la República de Irlanda es uno de los principales escollos de la negociación con el Reino Unido por su marcha del club comunitario.
“De momento estamos preparados para una salida ordenada para el Reino Unido, aunque nos falta tener un acuerdo en un cuarto de los puntos y se tratan de asuntos importantes, como la frontera con Irlanda. Como negociador de la UE hay siempre riesgos de que la negociación fracase”, avisó Barnier una entrevista divulgada hoy en el canal francés “France 2”.
Uno de los principales asuntos de fricción entre Londres y Bruselas es el restablecimiento de una frontera “dura” entre Irlanda del Norte, que pertenece al Reino Unido, y la República de Irlanda, miembro de la UE.
La UE propone que Irlanda del Norte se mantenga dentro del mercado único y la unión aduanera aunque el resto del país los abandone, a fin de proteger la invisibilidad de su frontera con la República de Irlanda y el proceso de paz.
Sin embargo, el Ejecutivo británico de la conservadora Theresa May ha rechazado mantener a Irlanda del Norte en el mercado único y la unión aduanera, porque “amenaza la integridad constitucional del Reino Unido”.
Barnier aclaró que en el acuerdo que negocian con Londres serán inflexibles con el mantenimiento de las cuatro libertades (libre circulación de mercancías, de trabajadores, de servicios y de capitales) y urgió a garantizar los derechos de los 4,5 millones de personas de ambas partes que viven en el Reino Unido y en el continente europeo.
“Estoy determinado a lograr un acuerdo, pero sin comprometer cosas que son innegociables para nosotros, como las cuatro libertades (entre la UE y el Reino Unido). Los británicos decidieron irse de la UE porque no querían la libre circulación de personas”, aseveró.
El negociador aseveró que espera tener un acuerdo con Londres este octubre y concluyó que es “prácticamente seguro” que el 30 de marzo de 2019 el Reino Unido abandone la UE, excepto si “hay un cambio de la posición” del Ejecutivo británico. (EFE).